dijous, 26 de febrer del 2009

Mireu allà dalt...

Aquí tenéis mi primer amigurumi, que, por el momento, viene a ser como mi primer hijo. La verdad es que al principio da un poco de miedo esto de ganchillear en tres dimensiones, y cuando empiezas tienes la sensación que siempre te lo van a tener que explicar todo pero, un día, cuando menos te lo esperas, empiezas a ver la luz al final del túnel, y observas todo lo que te rodea con otros ojos.
Es importante ser fuerte cuando llegas a este punto, porque en realidad tienes ganas de dejarlo todo para ponerte a dos manos con la lana y el ganchillo, y transformarlo todo, pero si consigues superar esa fase, te calmas y ves que no hay tiempo material para hacer todo lo que te gustaría.

De momento sólo lo he convencido para que enseñe la colita... o a lo mejor sale así porque todavía no le he cosido los ojos al pobre, y lleva ya esperándolos más de dos meses.

dimarts, 17 de febrer del 2009

Regalo sorpresa

No sé si os ha pasado, pero al empezar con esto de la afición tejeril tuve que aguantar alguna que otra risa por parte de amigos, familiares y allegados.
En parte por venganza y en parte porque se acercaba su cumpleaños, me propuse sorprender a J con un conjunto de cuello y gorro, de lana Livello, para dejarla con la boca abierta y acallar sus risas de forma automática.

Como veis por su cara, el regalo le encantó. Lo que ella no sabía en ese momento era que mi intención inicial era hacerle una bufanda, pero pensé que no tendría tiempo suficiente y me inventé un modelo de cuello con ojal, para ir más deprisa. Resulta que al final le hubiera podido hacer una bufanda de sobras, porque por culpa de nuestras apretadas agendas, no le pudimos dar el regalo hasta pasado un mes de la fecha.

Ahora a ver qué hago con la lana que me ha sobrado, que es bastante. Suerte que proyectos nunca faltan.

diumenge, 8 de febrer del 2009

Tu primera colonia... Chispas

Bueno, pues aquí tenéis a mi primer gorro. Con lana 100% alpaca, no podia ser de otro modo, en un sentido homenaje a Antonia. Siempre me había llamado la atención este mundillo, pero he tenido la desgracia de pertenecer a una familia donde ni una sola madre o abuela ha hecho ganchillo o punto en su vida. Y totalmente decidida a empezar con una tradición familiar, me planté en AYL, para ver qué podían hacer por mí.

Éste es el resultado, tejido en pleno mes de junio.

dimecres, 4 de febrer del 2009

Vale, vale... que sí!

Después de la insistencia de mis lectores (eran dos en total, pero muy insistentes), aquí estoy de nuevo, con energías renovadas y con ganas de hablar, o al menos de escribir, todo lo que pueda.

La idea inicial es publicar sobre mis creaciones, buenas o no tan buenas, pero seguro que después me voy por "los cerros de Úbeda" y acabo escribiendo sobre cualquier cosa.

Veremos en que queda todo esto.